SOBRE LA ENVIDIA ... DE MADRES HACIA HIJOS, ETC...

En primera instancia, es bueno definir qué es la envidia.

Todo es energía y lo sabemos. Pero, el destino que le damos, es otra cuestión.

Si amamos a alguien de verdad, no podremos más que desearle lo mejor, alegrarnos con sus actitudes, progresos, felicidad, alegrías, etc.

Esta no es una materia de condena, sino de contemplación profunda, con una muy genuina honestidad hacia nosotros mismos.

Existe sí, la envidia conciente, mas también, la que es subconsciente, sutil…..y la absolutamente inconsciente…

ENVIDIA CONSCIENTE: es aquella que conlleva en sí misma, la energía de la auto preservación a través del mal desear a otros, lo que uno mismo no consigue lograr, como ponderadas concreciones en la auto felicidad. Se establece entonces, un convenio de egos, entre una y otra persona, (esto puede suceder o no)…veamos…o sea: entre la persona envidiosa, y la que se cree víctima de envidias, siendo que ello también es una envidia sutil de sentirse absolutamente importante y también subestimado a tal proporción, de utilizar en dicha actitud, las dos caras de una moneda. El envidioso y el envidiado. Son dos polos. Es una moneda peligrosa. No es de oro, es de barro y arcilla. Puede llevarse a grados insospechados, hasta la pasión extrema de dos personas odiarse, establecer grados de rencor poderosísimos y dañarse en éstos planos y también batallar continuadamente en planos astrales. Peligroso…Dañino…

ENVIDIA SUBCONSCIENTE: es aquella energía que intentamos colocar en el sótano de nuestro subconsciente siempre que la sentimos, sin darle la oportunidad de un profundo análisis. Si no somos absolutamente genuinos en nuestro procesar espiritual, no podremos jamás limpiar este oscuro pasadizo llamado subconsciente.

 ¿Qué es lo que debería una persona, con buenas intenciones y aún creyendo amar a alguien, hacer, para definitivamente alquimizar dicho ego? En primera instancia, EL DARSE CUENTA de ello, de su sutilidad, es lo más provechoso. Darse cuenta…ya es un gran paso. Mr. Hyde, ha sido descubierto. Le hemos sacado la máscara a nuestro ego escondido. Muy bueno es. Muy bueno es. Ahora, tendremos que hacer algo con ello. Buscar la CAUSA-RAIZ de que dicha energía esté ahí. ¿Cuáles son las más populares, por decir un argumento coherente? Veamos: en primera instancia, LA SUBESTIMACIÓN. LA SUSCEPTIBILIDAD. EL CREERSE MENOS QUE… EL SER TAN INFELIZ QUE EL SIMPLE HECHO DE VER A OTRO FELIZ, LA PERSONA SE SIENTE DENIGRADA, (postura de víctima). Pero hay otros elementos más sutiles aún. A dichos elementos, les llamaremos: EXCUSAS. Es…como un  juego de ajedrez. Con su rey, su reina, peones, torres, alfiles, etc. Todo el mundo está, de una u otra forma, pendiente…. (analicemos el término): PEN-DIENTES….colgados de…el mundo exterior. De qué es lo que las otras personas hacen, de lo que tienen, de lo que no tienen, de lo que sienten o dejan de sentir. Y desde ese punto crucial, establecer un tobogán decadente de energías, que le harán sentirse en un profundo POZO DEPRESIVO.

Prosigamos: ¿cual es la jugada eficaz que podemos hacer, no en contra del ego, sino para la transmutación del mismo? Primer paso: luego de haberlo detectado, es analizar cuándo se presenta, con quien/quienes, ante qué personas se detecta ello. Si es con personas encarnadas, conocidas, es porque hay una guerra intrínseca en la persona que envidia. Puede ser que en otro caso que detallamos ahora, la persona A es la que envidia y la persona B no se deja invadir por dicho sentimiento-energía.  ¿Qué es lo que sucede entonces si la segunda persona no es que esté defendiéndose de la envidia, sino que, al no importarle lo que el otro sienta, prosigue con su vida de una forma correctísima y haciendo o cumpliendo su programación existencial en el día a día? Pues es muy simple: la energía de envidia proyectada por la persona A, volverá como boomerang energético hacia ella misma. ¿Qué veremos entonces, a nivel físico en la persona A? Varias cosas. Su vida no será un cesto de virtudes. Los efectos energéticos irán primero al chakra  plexo solar. Lo emocional se irá incrementando, el egoísmo, la depresión, la sensación brusca de soledad sin motivo aparente, impedimentos económicos, trabas de todo tipo, sus relaciones afectivas, sentimentales, sexuales, irán de mal en peor. LA AUTOENERGIA DE LA ENVIDIA, HA REGRESADO COMO MONSTRUO HACIA LA PERSONA A. Si dicho ser, hombre o mujer, no toma riendas en su proceso, sucederán cosas peores y entonces sí, la VERDADERA SOLEDAD, como bien dice el Rabí… SERÁ.

ENVIDIA INCONSCIENTE: aquí nos encontramos con antiguos rencores, resentimientos, envidias de otras vidas que pueden ahora, en el momento actual, presentarse de forma inconsciente, hacia personas que decimos amar, o amamos a nuestra manera, pero sin querer, les hacemos daño, eyectándole desde el plano inconsciente, la energía de la envidia.  ¿Por qué? Porque la persona ha estado vibrando en reiteradas vidas en la envidia, contra la persona o personas hacia quien o quienes sienta dicho tsunami pléxico. (Acá también incluimos los casos en que madres tienen envidia de sus hijos y viceversa). En este caso, será más bien: coronario. Porque el plano inconsciente está oculto en nuestras esferas mentales. Unido entonces el centro coronario con el centro plexo solar, tendremos una conjunción de energías… chakras mancomunados en una potente explosión, que decantará contra personas que decimos “querer bien” o hasta inclusive “amar” , y las confrontaciones tomarán lugar.

 Lo mismo, si fueran estas envidias contra personas que hoy por hoy están desencarnadas. Dichos “fantasmas” o espíritus persecutores, no querrán dejar en paz a las personas a las cuales sintieron envidia. Querrán aposentarse en estos planos astrales, sin querer ascender a planos de luz, por el mero hecho de seguir deseando destruir la vida de quien o quienes envidiaron. Esto, ocurre con más frecuencia de lo que se piensa. Así es.

Por ello, apelemos siempre, a estar focalizados en nosotros mismos, en nuestro propio proceso, porque tenemos aún mucho por “leer” en nuestras propias vidas. Y no es sacando material de la Internet que nos proveeremos de espiritualidad, sino haciendo un proceso de encarar firme y seriamente nuestros propios improcesos.

No hay crítica ni culpa en ello, hay simple y maravillosamente: UN ESTADO DE ALERTA CONSCIENTE.

Esto es simplemente, un preámbulo, de la temática en cuestión. Los casos en el mundo, son increíblemente fuertes. Precozmente, hasta en los niños, debemos descubrir, madres, padres, qué ocurre con nuestros hijos, si es que les vemos, observamos… tener, sentir envidia hacia sus compañeritos, hermanos, amigos, etc. A estar prevenidos y no dejar crecer dicho monstruo metafísico.

                                                                           SHEYLA.