“COMANDANTE
ADONIESIS EXPLICA PROCESOSEVOLUTIVOS DEL HOMBRE”.
(Recibido en Itajaí, Brasil, el 08/06/93)
Cuando las
primeras chispas se derramaron, se eyectaron del Padre
Amor, viéronse como perdidas en el espacio intrasideral, como quien no
sabe hacia dónde ir... Eran los primeros síntomas de in-consciencia que
se derramaban intermitentemente en ese plano de consciencia de lo que mucho más
tarde sería: el Hombre...
Bien: cuando
esos átomos, chispas, centellas del Padre Amor, se hubieron de
desprender, y se vieron eyectadas en forma de inmensas agrupaciones hacia el intra
espacio sideral, viéronse eyaculadas como “semen divino” hacia
el lugar preferencial de su imolecular del macro cosmos. (Es,
en palabras más básicas, como “los poros del Padre”... es como si
cada centella se depositara en una porosidad espacial, para autofecundarse.
¿Comprendéis?)... Pero: sin consciencia aún, apremiadas por
una necesidad que era del Padre Amor, quien, en su
consciencia macra y divina, les apremiaba por una evolución gradual
pero progresiva...
Esas
centellas... agrupadas como comunidades hermosas de luz finita, (pero
esplendente), sólo parecían “amebas de luz”, esperando el ansiado
momento de su propia fecundación en otro plano de existencia. Es, en esa
dimensión de consciencia, que se plantea el plano que más adelante se
llamará: in-consciente. Aquel plano que alguna vez tendría
esa centella, cuando multiplicara fecundativamente sus agrupaciones atómicas,
una a una.
En esta PRIDIMENSIÓN,
cada centella del Padre Amor, se agolpa junto a otras, como buscando
ayuda. Se sienten (permitidme este término), como con miedo a estar a solas.
Porque están dentro de un útero que es espacial, intrasideral.
Es un parto del Padre Amor... todas sus centellas...es y son momentos de
tanta valía cósmica, que esa fecundación finita en ese momento, no se
especifica en sí misma, sino en agrupaciones, como conglomerados atómicos que
se agolpan latiendo armoniosamente para un entendimiento mayor. Es la primera
sensación de soledad aparente...Por eso: en la pridimensión se
funda la primera comunidad...la Comunidad de la Inconsciencia... ¿Vais
comprendiendo?...
Una vez que el vitatrón (la centella divina finita), toma
y cobra fuerza, se auto adecua a su vez para una vivencia mucho más acelerada y
para, por otra parte, citarse a sí misma, a un auscultamaiento mayor en la consciencia
divina. Esto da por resultante que: se produce la eyección de
esas centellas (con su in-consciente en formación ya), hacia una
progresiva movilización, más bien: situación), (estar en...) (Esto no
incluye el movimiento longitudinal)... sino más bien un
movimiento intracósmico... divino... que le dará
movilizaciones de mayor envergadura en sus átomos vitales, los cuales llevarán
ya una enorme promesa: “evolucionar”... Por eso la
pridimensión es una era de nebulosas dimensionales... Es el
principio de la in-consciencia...
Cuando dichas centellas adquieren un vigor
energético y una “nota” mayor en su conducta evolutiva, se “desprenden”
nuevamente (valga esta expresión), hacia un habitáculo nuevo que les
volverá a fecundar y a “parir” (espiritualmente hablando). Comienza
pues, el plano de la BIDIMENSIÓN, el cual ya en sus fases
primarías, llevará el registro y el código evolutivo de que debe crear
su plano subconsciente, el cual, irá cobrando dimensión, una vez que
haya aprendido lo que el plano anterior le hubo de aportar. ¿Comprendéis
hermanos míos?...
¿Qué es la BIDIMENSIÓN?... Es el segundo
plano dimensional que aportará orígenes semiconscientes a quienes estén
llegando a ese plano concienzal. ¿Cómo se llega a ese plano
bidimensional? Pues... progresivamente, cuando “el temor
original” se va perdiendo lentamente, y el centelleo de
aquella consciencia divina, le impulsa intermitentemente a una animación mayor
que la anterior. Es entonces que: cuando dicha centella se impulsa a sí
misma a una frecuencia vibratoria mayor, el plano
subconsciente va adquiriendo una vigorización; pero aún en esos planos:
NO hay consciencia de qué es la luz, porque está en un
plano de tinieblas aparentes... esas tinieblas se imponen a sí mismas y
quieren decir en palabras simples: cuando no se es luz, sólo se acepta
lo que se posee por instinto, y es en esta dimensión: “la
oscuridad”.
Es el descenso a los infiernos de las centellas finitas. Tratad de
comprenderlo. Y... en esa oscuridad, la agresión, la violencia, la
sensación de soledad terrible, el tormento interno de sentirse interiormente heridos
por la aparente “orfandad” del Padre... hace que se plenipotencien en
sensitivas experiencias que el macro y micro cosmos le ofrecerán para su mayor
crecimiento en sus planos de consciencia...semi adquirida por estos momentos.
¿Váis comprendiendo?...
Bien: cuando
dichas centellas del padre van compenetrándose en una bidimensión menos densa,
cuando la oscuridad va penetrando en los primerísimos planos de “desvele
espiritual” (oscuridad aparente)... es cuando dichas centellas irán a ser
eyectadas hacia una octava superior de consciencia y será ella: “la
bidimensión en contacto con la TRIDIMENSIÓN”. ¿Comprendéis?...
En estos
originales destellos de luminosidad confusa, la cromatización o carismas o
siete rayos del Padre Amor, estarán aún en conflicto o caos
(un caos que es más bien): un reordenamiento de cosas, es: un ordenamiento de los planos
mentales para una graduación de consciencia. Es por tanto que: dichas
entidades bidimensionales, comenzarán a pujarse entre ellas, para querer
ingresar en una individualidad confusa,
en un “ENTRELACE” con los mundos de tridimensión...esto conlleva de por
sí: “un cambio de casa o de útero”; por tanto: dichas centellas
irán a adentrarse en un solazado estímulo, porque irán previendo que en algún
momento ellas (de por sí solas), podrán moverse, y ya no serán simplemente “amebas
espirituales”.
Hay aquí, un
plenipotente fallo y confusiones muchas en el comienzo de los planos semi
conscientes. El plano SUBCONSCIENTE se irá formando, y las
formas de expresión de dichas entidades de la bidimensión irán a adquirir un
solapado escudo que, como no conocen la “luz ideal del Padre”,
querrán simularle. Como cuando un hijo quiere adoptar todas las posturas de su
Padre, pero...al ser un infante, no sabe hacerlo convenientemente. Sería lo
mismo que: dichas centellas, en este tránsito hacia la TRIDIMENSIÓN, irán
a querer “copiar” lo que su Padre les dejará testamentado en
su in-consciente...pero no sabrán hacerlo correctamente, ya que
ellos no tienen aún el plano consciente desarrollado aún en
esta etapa. Falta mucho para ello...
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Comienza en
esta nueva fase, el pleno ingreso en el plano de la TRIDIMENSIÓN... En
sus primeras manifestaciones. Debe haber un “aquiete”, para formas
tomar. Formas muy primitivas por cierto. Son experiencias
insondables, que vosotros ni siquiera podéis calcular ni imaginar. Pero esos
vestigios, de los reinos inferiores a los cuales pertenecisteis en primera
instancia, guardan en este tiempo actual, una vigencia ya que todo queda
registrado en vuestro campo áurico...por tal motivo, avanzando en
las eras de las formas, fuisteis llegando a ser hombres al
fin, cumplimentando etapas lentísimas, graduales y de progresivas
activizaciones en los planos de la mente.
Cuando estuvisteis
ingresados en el reino animal, los centros o chakras o vórtices de
energía, convergieron a un estímulo mayor de vida integral con los
planos mentales primarios, y fue allí, que comenzó en sus fases primarías,
el “INICIO DEL PLANTEO CONSCIENTE. Pero aún, bajo el estímulo
del instinto y del limitado raciocinio que
luego el primer hombre terreno tuvo, para pasar luego a planos de estructuras
conscientes superiores. ¿Vais comprendiendo, hermanos?...
Comienza en
esta fase, las RONDAS ENCARNATORIAS, en donde la muerte y el
renacer se acentúan como formas de vida en redundancia de evoluciones
mayores. Pues...el hombre ha tenido que tropezar muchas veces con la “misma
piedra”, para poder llegar al estado actual...
Pasan las
fases de tridimensión primarías, terminados macro ciclos completos (macro
eras), en dichos mundos tridimensionales. El hombre va acercándose a la gran
llave que le abrirá el camino de regreso al padre amor... Ese camino será: “el
discernimiento del amor paterno de Dios”; debéis comprenderlo.
Cuando el
hombre siente la profunda necesidad de adentrarse en sí mismo, y buscar su Cristo
interno...es allí, que en esa profundización, logrará penetrar
en su castillo interior, e ingresar a un nuevo plano de
consciencia adquirida ya: su inconsciente... pero
un in-consciente que ya no es instintivo, ya no es sensitivo, ya es:
derivación de todos sus átomos hacia la luz Crística en plena consciencia
vigílica. ¿Comprendéis?... Es pues, que el hombre, en esta etapa,
comienza a verse por dentro. Comprendiendo sus etapas anteriores de
“ionización espiritual”. Lo que en otras palabras más simples
sería: el hombre comienza a saber quién es, de dónde viene y
hacia dónde va. Esto da comienzo a iniciaciones
espirituales de mayor envergadura (iniciaciones Jerárquicas), las cuales lo
llevarán a un mayor estadio de consciencia que será: la consciencia
Crística, Cristocéntrica o consciencia de CUARTA DIMENSIÓN.
LA
CUARTA DIMENSIÓN de consciencia adquirida, es un estímulo de fuerzas
inevitables y sublimes que se aposentarán en el Cristo interno de la
centella (ahora desenvuelta), desarrolladas sus plenipotenciales
actividades internas más sacras... y es en este momento, eyectadas ya de la tercer
dimensión de consciencia, que comenzarán una actividad mayor que la
anterior tridimensional y será: “el trabajo Crístico en pro de todo
su sistema solar”... (El que habita). ¿Comprendéis?...
EL HOMBRE
CUADRIMENSIONAL activará sus nuevos centros energéticos, para una derramación
superior de amor, hacia todo el sistema, convirtiéndose él mismo, en planificador de su propia existencia
futura en los niveles superiores subsiguientes...
Es, en
este nuevo orden de cosas, que él mismo se ha
establecido en hombre cuadrimensional...
que todo irá redundando en pro de un “concierto interno”, “una
sinfonía” armoniosa de sí mismo. El mismo ya no será una nebulosa...
sino será una enorme activización de todos sus átomos pero en plena
consciencia Crística de acción fecunda. ¿Lográis comprenderlo?...
Por tal
razón, es que LOS SERES CUADRIMENSIONALES, serán “transportes de
corpúsculos solares” en sí mismos y por sí mismos. En otras palabras:
los seres de cuarta dimensión, serán transformantes de la luz solar, en
sus siete carismas cromáticos o siete rayos. En palabras aún más
simples: el hombre cuadrimensional se convertirá en un
pleno arco iris vivo y erecto hacia una dimensión de consciencia
superior...
Termina aquí, la ronda primaría cuadrimensional...
Cuando el hombre de cuarta dimensión, (que
aún ha formado su familia, en sus propios habitáculos familiares), culmina esta
ronda primaría cuadrimensional... estabiliza
todos sus nuevos centros o chakras... y los convierte en una
integración total de su mónada finita, o sea de su “otra parte”, o
sea...de su complemento divino o alma gemela.
Cuando el
hombre cuadrimensional ha comprendido la necesidad de volverse a autofecundar (espiritualmente
hablando), es allí, en ese preciso instante sideral, que se convierte en un
foco inmenso de luz blanca azulada, con destellos
poderosísimos que servirán de “enchufe” (perdón por el término)...
para con la parte complementaria que a su vez, estará ya
ingresada en sí misma como alma o centella finita de iguales
condiciones espirituales y evolutivas, para esa unión (más bien: integración
total), de lo que se convertirá: “UN ANDRÓGINO CÓSMICO”... y ya
no habrá jamás de separarse de su complemento energético (yin y
yang). Ya que quedarán eternamente unificados,
integrados, hasta el momento en que, una de esas dos centellas decida internarse nuevamente en un mundo
tridimensional, por servicio de
amor Crístico (solamente). Debe comprenderse esto muy
bien...: Sólo por servicio de misericordia descenderá, se desprenderá de su complemento y
descenderá encarnadamente en los planos densos nuevamente, pero esta vez: con
la plena consciencia de que está estrechamente ligado a su complemento
energético, aquel que perdió un día cuando tuvo que
hacerse hombre o mujer (planos heterosexuales)...
¿Comprendéis?...
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Culmina
pues aquí, en esta fase, la RONDA CUADRIMENSIONAL, aquella a
la cual le ha costado tanto y tanto al hombre llegar. Pero ahora, los planos
mentales han adquirido un potencial valiosísimo y se integrarán mayúsculamente
a los PLANOS MONÁDICOS.
De eso: hablaremos
más adelante...
Os amamos y
esperamos auscultamientos de estas nuestras palabras, en pro de vuestra
comprensión mayor de vosotros mismos...
Paz... Amor...
y Comprensión, hermanos amados...
Adoniesis.
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