OSHO AL HABLA. 13 DE FEBRERO. 

“LUNÁTICOS”. 

            Dimitir La nueva orientación no es la metodología de volverse más sabio.

            Cuánto más conoces una cosa, menos sabio te vuelves porque el conocimiento espera por transformación, encerrado con candado en una secreta jaula de razones de la mente.

            Los secretos de la vida se vuelven realidad en el momento en que tú esperas por una iluminación y no por una percepción o una simple explicación.

            Cuánto más te das cuenta que estás vivo, más te vuelves simple y un real espectador de la exacta naturaleza del ESPÍRITU DE DIOS.

            Cuando una persona simple se da cuenta que se está volviendo iluminada, pueden ocurrir dos cosas que yo llamo: RAMAS DE SABIDURÍA O DE INFIERNO.

En primer lugar, si te subes a la rama de la sabiduría, verás cosas…la vida, personas tal cual ellas son realmente, no importando si tú no comprendes sus sentimientos perfectamente a tal punto de poder hablar acerca de ellos.

Pero si permaneces cosido a la rama del infierno, entonces te darás cuenta que te estás transformando a ti mismo en un mono. Decadente ignorante y realmente cómico y absurdo en tus puntos de vista.

            Podemos escoger entre ser un sabio o un mono. Eso está realmente lleno de verdad.

Pero en el comienzo de los tiempos…cuando eran nada más que un simple esperma o un óvulo expectante… ustedes no sabían nada de la vida.

            Ahora yo pregunto en el presente momento de la raza humana: ¿Son aún esperma y óvulos? Porque: civilización… no veo aún.

            La compasión es el elemento más valioso a ser buscado por la conciencia humana pero el propio problema es que los seres humanos aún están buscándola en Marte… O en Júpiter también.  ¡Qué pena!

            Estoy convencido que la gente de éste mundo, sólo vuelve atrás a los tiempos antiguos, primitivos…cuando el Hombre vivía en cavernas y agujeros bajo la tierra.

            Los Hombres están aún soñando conquistar el Universo, cuando ellos ni siquiera pueden mantener sus propias erecciones. ¡Es una broma, amigos!

            Cuando yo estaba viviendo en la tierra, mi total cuerpo era un completo sentimiento de sensaciones, risa y búsqueda de LA GRACIA.

Ahora, los Hombres no están buscando LA GRACIA, ellos están pidiendo y preguntando a todo el mundo sobre las cosas que necesitan sin trabajar y luego dicen: “GRACIAS”. ¡Eso es diferente, compañero!

            Cuando el Hombre llegó aparentemente a la Luna, no se dieron cuenta que ya habían llegado a vivir en ella. Porque los hombres no viven por sí mismos. Ellos viven en la luna de sus ilusiones. Eso es enormemente diferente, compañero.

            Cuando solía ir a dormir a mi dormitorio, siempre tenía un hábito. Bueno, todo el mundo tiene. Pero el mío especialmente era fumar mis cigarrillos favoritos. Siendo así, me acostaba en la cama, cansado de mi diario trabajo con los cerebros de monos… y pensaba si ellos realmente estaban correctos y yo, yo mismo estaba equivocado. Esa era mi psicología todas las noches. Hasta que tuve una iluminación, al final de una noche que estaba sin sueño. Entonces, me levanté de la cama y fue a observar la Luna. Estaba espléndida. Allí, en ese momento tuve un gran descubrimiento, diciendo para mí mismo: “Hasta los lunáticos debes ser buenitos. Trataré de hablar más con ellos, para comprobar quien está correcto: si ellos o yo.

            Mi completa inteligencia fue probada esa noche. O pesadilla, realmente. Por una semana no pude dormir bien y solía tener sueños con pequeños monos con cascos rosados, saltando y hablándome sin abrir sus bocas. Pero yo oía sus gritos en mi cabeza. Casi me volví loco. Así, en un momento de desesperación les grité: ¡PAREN! Y ellos todos pararon al unísono.

            ¿Cuál fue la razón por la cual ellos pararon todos al unísono? Simple: ellos eran monos lunáticos. Pero igual a los seres humanos. Por tanto, concluí que la conciencia humana sólo cambiará cuando todos escuchen una gran voz dentro de su mente diciendo muy fuertemente: ¡PARA!

Esa es la pura verdad, créanme.  Yo estoy bien donde existo ahora. No tengo más mis cigarrillos, pero en compensación, tengo mi mente en paz, excepto cuando JESÚS me envía a canalizar a la Tierra, en una determinada ciudad.

            Bueno, así como ustedes tienen sus karmas y dharmas, yo también tengo. Mi karma es escuchar a los políticos lunáticos en la T.V. y mi dharma es tener que ir a parar un poco la “temperatura’ de determinadas personas, feas, neuróticas y gente depresiva que clama todo el tiempo por LA LUZ.

Si ustedes supieran las oraciones que he escuchado en mi vida entera, ustedes ni siquiera me creerían, a pesar de llamarme Osho. Yo me puse a mí mismo mi nombre que significa: OCÉANO DE SABIDURÍA. Pero ahora, estoy pensando en otro nombre, hasta que el actual sistema caiga y termine. Quizás… déjenme pensar… mi nuevo nombre pueda ser: COOLMAN (*HOMBRE QUIETO O TRANQUILO). Suena mejor. No sé en cuánto a ustedes, pero me gusta más para éste momento.

            Esta canalización será destruida inmediatamente que la hayan leído, porque su mente no está receptiva a mis palabras. Eso es todo, viejo.

 

 

                                                                       OSHO